Add parallel Print Page Options

Pablo condena el orgullo espiritual

Me cuesta creer lo que me informan acerca de la inmoralidad sexual que hay entre ustedes, algo que ni siquiera los paganos hacen. Me dicen que un hombre de su iglesia vive en pecado con su madrastra.[a] Ustedes están muy orgullosos de sí mismos, en cambio, deberían estar llorando de dolor y vergüenza y echar a ese hombre de la congregación.

Aunque no estoy con ustedes en persona, sí lo estoy en el Espíritu;[b] y como si estuviera ahí, ya emití mi juicio sobre ese hombre en el nombre del Señor Jesús. Ustedes deben convocar a una reunión de la iglesia.[c] Yo estaré presente en espíritu, igual que el poder de nuestro Señor Jesús. Entonces deben expulsar a ese hombre y entregárselo a Satanás, para que su naturaleza pecaminosa sea destruida[d] y él mismo[e] sea salvo el día que el Señor[f] vuelva.

Es terrible que se jacten sobre dicho asunto. ¿No se dan cuenta de que ese pecado es como un poco de levadura que impregna toda la masa? Desháganse de la vieja «levadura» quitando a ese perverso de entre ustedes. Entonces serán como una nueva masa preparada sin levadura, que es lo que realmente son. Cristo, nuestro Cordero Pascual, ha sido sacrificado por nosotros.[g] Por lo tanto, celebremos el festival, no con el viejo pan[h] de perversidad y maldad, sino con el nuevo pan[i] de sinceridad y verdad.

Cuando les escribí anteriormente, les dije que no se relacionaran con personas que se entregan al pecado sexual; 10 pero no me refería a los incrédulos que se entregan al pecado sexual o son avaros o estafadores o rinden culto a ídolos. Uno tendría que salir de este mundo para evitar gente como esa. 11 Lo que quise decir es: no se relacionen con ninguno que afirma ser creyente[j] y aun así se entrega al pecado sexual o es avaro o rinde culto a ídolos o insulta o es borracho o estafador. Ni siquiera coman con esa gente.

12 No es mi deber juzgar a los de afuera, pero sí es responsabilidad de ustedes juzgar a los que son de la iglesia y están en pecado. 13 Dios juzgará a los de afuera; pero como dicen las Escrituras: «Quiten al malvado de entre ustedes»[k].

Footnotes

  1. 5:1 En griego con la esposa de su padre.
  2. 5:3 O en espíritu.
  3. 5:4 O En el nombre del Señor Jesús, ustedes deben convocar a una reunión de la iglesia.
  4. 5:5a O para que su cuerpo sea destruido; en griego dice para la destrucción de la carne.
  5. 5:5b En griego y el espíritu.
  6. 5:5c Otros manuscritos dicen el Señor Jesús; incluso otros dicen nuestro Señor Jesucristo.
  7. 5:7 En griego ha sido sacrificado.
  8. 5:8a En griego no con levadura vieja.
  9. 5:8b En griego sino [con pan] sin levadura.
  10. 5:11 En griego un hermano.
  11. 5:13 Dt 17:7.

Un caso de inmoralidad juzgado

De cierto se oye que hay entre vosotros fornicación, y tal fornicación cual ni aun se nombra entre los gentiles; tanto que alguno tiene la mujer de su padre.(A) Y vosotros estáis envanecidos. ¿No debierais más bien haberos lamentado, para que fuese quitado de en medio de vosotros el que cometió tal acción?

Ciertamente yo, como ausente en cuerpo, pero presente en espíritu, ya como presente he juzgado al que tal cosa ha hecho. En el nombre de nuestro Señor Jesucristo, reunidos vosotros y mi espíritu, con el poder de nuestro Señor Jesucristo, el tal sea entregado a Satanás para destrucción de la carne, a fin de que el espíritu sea salvo en el día del Señor Jesús.

No es buena vuestra jactancia. ¿No sabéis que un poco de levadura leuda toda la masa?(B) Limpiaos, pues, de la vieja levadura, para que seáis nueva masa, sin levadura como sois; porque nuestra pascua,(C) que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros. Así que celebremos la fiesta, no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con panes sin levadura,(D) de sinceridad y de verdad.

Os he escrito por carta, que no os juntéis con los fornicarios; 10 no absolutamente con los fornicarios de este mundo, o con los avaros, o con los ladrones, o con los idólatras; pues en tal caso os sería necesario salir del mundo. 11 Más bien os escribí que no os juntéis con ninguno que, llamándose hermano, fuere fornicario, o avaro, o idólatra, o maldiciente, o borracho, o ladrón; con el tal ni aun comáis. 12 Porque ¿qué razón tendría yo para juzgar a los que están fuera? ¿No juzgáis vosotros a los que están dentro? 13 Porque a los que están fuera, Dios juzgará. Quitad, pues, a ese perverso de entre vosotros.