Add parallel Print Page Options

Grito angustiado por Moab:
sus fugitivos van a Soar,
van hacia Eglat Salisá.
Por la cuesta de Lujit
sube la gente llorando;
por el camino de Joronáin
se oyen gritos desgarradores.
Las aguas de Nimrín
dan paso a la aridez:
se seca el heno,
se acaba la hierba,
no queda verdor.
Por eso, recogen lo que queda,
van acaparando provisiones,
las transportan al torrente de los Sauces.

Read full chapter