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Oración de Jonás

[a]Entonces Jonás oró al Señor su Dios desde el interior del pez y dijo:

«En mi gran aflicción clamé al Señor
    y él me respondió.
Desde la tierra de los muertos[b] te llamé,
    ¡y tú, Señor, me escuchaste!
Me arrojaste a las profundidades del mar
    y me hundí en el corazón del océano.
Las poderosas aguas me envolvieron;
    tus salvajes y tempestuosas olas me cubrieron.
Entonces dije: “Oh Señor, me has expulsado de tu presencia;
    aun así volveré a mirar hacia tu santo templo”.

»Me hundí bajo las olas
    y las aguas se cerraron sobre mí;
    las algas se enredaban en mi cabeza.
Me hundí hasta las raíces de las montañas.
    Me quedé preso en la tierra,
    cuyas puertas se cierran para siempre.
Pero tú, oh Señor mi Dios,
    ¡me arrebataste de las garras de la muerte!
Cuando la vida se me escapaba,
    recordé al Señor.
Elevé mi oración sincera hacia ti
    en tu santo templo.
Los que rinden culto a dioses falsos
    le dan la espalda a todas las misericordias de Dios.
Pero yo te ofreceré sacrificios con cantos de alabanza,
    y cumpliré todas mis promesas.
    Pues mi salvación viene solo del Señor».

10 Entonces el Señor ordenó al pez escupir a Jonás sobre la playa.

Footnotes

  1. 2:1 Los versículos del 2:1-10 corresponden al 2:2-11 en el texto hebreo.
  2. 2:2 En hebreo Desde el Seol.

Oración de Jonás

Entonces oró Jonás a Jehová su Dios desde el vientre del pez, y dijo:

Invoqué en mi angustia a Jehová, y él me oyó;

Desde el seno del Seol clamé,

Y mi voz oíste.

Me echaste a lo profundo, en medio de los mares,

Y me rodeó la corriente;

Todas tus ondas y tus olas pasaron sobre mí.

Entonces dije: Desechado soy de delante de tus ojos;

Mas aún veré tu santo templo.

Las aguas me rodearon hasta el alma,

Rodeóme el abismo;

El alga se enredó a mi cabeza.

Descendí a los cimientos de los montes;

La tierra echó sus cerrojos sobre mí para siempre;

Mas tú sacaste mi vida de la sepultura, oh Jehová Dios mío.

Cuando mi alma desfallecía en mí, me acordé de Jehová,

Y mi oración llegó hasta ti en tu santo templo.

Los que siguen vanidades ilusorias,

Su misericordia abandonan.

Mas yo con voz de alabanza te ofreceré sacrificios;

Pagaré lo que prometí.

La salvación es de Jehová.

10 Y mandó Jehová al pez, y vomitó a Jonás en tierra.