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El SEÑOR le dijo a Moisés: «Habrá casos en que alguien cometa pecado contra el SEÑOR al defraudar a otros de las siguientes maneras: engañar a alguien en algo que este le había prestado o dado a cuidar, mentir sobre un préstamo recibido, robar, estafar, encontrar algo que estaba perdido y negar haberlo encontrado, jurar en falso, o cualquier otro pecado que se suele cometer. En todos esos casos, el que los comete es culpable y tendrá que devolver lo que se robó, lo que se apropió con engaño, lo que estaba cuidando o lo que negó haber encontrado; cumplirá el juramento. Tendrá que devolver todo a su dueño más una quinta parte del valor total, y lo hará el mismo día que lleve su sacrificio de restitución. Llevará ante el SEÑOR un carnero de su rebaño que no tenga ningún defecto, del valor fijado para un sacrificio de restitución. Luego el sacerdote purificará ante el SEÑOR a esa persona y quedará perdonada de lo que hizo que fuera culpable».

Sacrificios que deben quemarse completamente

(Éx 29:38-43; Nm 28:1-8)

El SEÑOR le dijo a Moisés: «Ordénales esto a Aarón y a sus hijos: Esta es la ley del sacrificio que debe quemarse completamente. El animal que se sacrifique se dejará sobre el altar toda la noche hasta la mañana siguiente con el fuego ardiendo. 10 El sacerdote vestirá túnica y ropa interior de lino, sacará las cenizas que dejó la quema del sacrificio y las colocará a un lado del altar. 11 Después, el sacerdote se cambiará de ropa, sacará las cenizas del campamento y las llevará a un lugar limpio. 12 El fuego del altar se mantendrá siempre encendido, nunca se dejará apagar. El sacerdote echará leña al altar cada mañana, acomodará al animal que se va a quemar y también quemará en el altar la grasa de las ofrendas para festejar. 13 El fuego debe permanecer siempre encendido sobre el altar; no debe dejarse apagar nunca.

Ley para las ofrendas de cereal

14 »Esta es la ley de la ofrenda de cereal. Los hijos de Aarón la presentarán ante el SEÑOR, frente al altar. 15 El sacerdote tomará un puñado de la harina de alta calidad de la ofrenda de cereal, junto con el aceite y todo el incienso de la ofrenda, y lo quemará en el altar, como representación de toda la ofrenda, para olor agradable al SEÑOR. 16 El resto de la ofrenda se la comerán Aarón y sus hijos, pero sin levadura y en un lugar consagrado, en el patio de la carpa del encuentro. 17 No lo cocinarán con levadura. Ese resto de la ofrenda se lo he dado a ellos como la parte que les corresponde de la ofrenda de cereal, y es algo tan santo como lo son el sacrificio por el pecado y el sacrificio de restitución. 18 Así que de generación en generación, todos los hijos varones descendientes de Aarón podrán comer la parte que les corresponde a ellos de las ofrendas quemadas al SEÑOR. Todo lo que toque esas ofrendas quedará consagrado».

Ofrendas de cereal de los sacerdotes

19 El SEÑOR le dijo a Moisés: 20 «Esta es la ofrenda que Aarón y sus hijos presentarán al SEÑOR el día en que sean consagrados: 2 kilos de harina de la más alta calidad como ofrenda de cereal, ofrecerán la mitad por la mañana y la otra mitad por la tarde, permanentemente. 21 La prepararán con aceite en un sartén y luego la presentarán bien mezclada, tajada en pedazos, como ofrenda de cereal, de olor agradable al SEÑOR. 22 Así es como el sumo sacerdote, descendiente de Aarón, preparará la ofrenda de cereal. Esta ofrenda siempre se ofrecerá al SEÑOR y se quemará completamente. 23 Todas las ofrendas que hagan los sacerdotes serán quemadas completamente, no se podrán comer».

Los sacrificios por el pecado

24 El SEÑOR le dijo a Moisés: 25 «Dales a Aarón y a sus hijos esta ley respecto a los sacrificios por el pecado. El animal que se ofrezca al SEÑOR como sacrificio por el pecado será degollado en el mismo lugar donde se degüellan los animales que se van a quemar, pues es algo muy sagrado. 26 El sacerdote que ofrezca el sacrificio por el pecado se comerá el sacrificio en un lugar consagrado, en el patio de la carpa del encuentro. 27 Todo lo que toque la carne del sacrificio quedará consagrado y si la ropa llega a quedar salpicada de sangre, entonces hay que lavar la ropa en un lugar consagrado. 28 Además se romperá toda vasija de barro en la que se haya cocinado el animal del sacrificio por el pecado, pero si se cocinó en una vasija de bronce, sólo habrá que restregarla y lavarla con agua.

29 »Todo varón que pertenezca a la familia del sacerdote puede comer la carne del sacrificio por el pecado, el cual es muy sagrado. 30 Pero si la sangre del animal del sacrificio por el pecado fue llevada a la carpa del encuentro y empleada para purificación en el santuario, no se podrá comer la carne, sino que el sacrificio tendrá que quemarse en el fuego.

Habló Jehová a Moisés, diciendo: Cuando una persona pecare e hiciere prevaricación contra Jehová, y negare a su prójimo lo encomendado o dejado en su mano, o bien robare o calumniare a su prójimo, o habiendo hallado lo perdido después lo negare, y jurare en falso; en alguna de todas aquellas cosas en que suele pecar el hombre, entonces, habiendo pecado y ofendido, restituirá aquello que robó, o el daño de la calumnia, o el depósito que se le encomendó, o lo perdido que halló, o todo aquello sobre lo que hubiere jurado falsamente; lo restituirá por entero a aquel a quien pertenece, y añadirá a ello la quinta parte, en el día de su expiación. Y para expiación de su culpa traerá a Jehová un carnero sin defecto de los rebaños, conforme a tu estimación, y lo dará al sacerdote para la expiación. Y el sacerdote hará expiación por él delante de Jehová, y obtendrá perdón de cualquiera de todas las cosas en que suele ofender.(A)

Leyes de los sacrificios

Habló aún Jehová a Moisés, diciendo: Manda a Aarón y a sus hijos, y diles: Esta es la ley del holocausto: el holocausto estará sobre el fuego encendido sobre el altar toda la noche, hasta la mañana; el fuego del altar arderá en él. 10 Y el sacerdote se pondrá su vestidura de lino, y vestirá calzoncillos de lino sobre su cuerpo; y cuando el fuego hubiere consumido el holocausto, apartará él las cenizas de sobre el altar, y las pondrá junto al altar. 11 Después se quitará sus vestiduras y se pondrá otras ropas, y sacará las cenizas fuera del campamento a un lugar limpio. 12 Y el fuego encendido sobre el altar no se apagará, sino que el sacerdote pondrá en él leña cada mañana, y acomodará el holocausto sobre él, y quemará sobre él las grosuras de los sacrificios de paz. 13 El fuego arderá continuamente en el altar; no se apagará.

14 Esta es la ley de la ofrenda: La ofrecerán los hijos de Aarón delante de Jehová ante el altar. 15 Y tomará de ella un puñado de la flor de harina de la ofrenda, y de su aceite, y todo el incienso que está sobre la ofrenda, y lo hará arder sobre el altar por memorial en olor grato a Jehová. 16 Y el sobrante de ella lo comerán Aarón y sus hijos; sin levadura se comerá en lugar santo; en el atrio del tabernáculo de reunión lo comerán. 17 No se cocerá con levadura; la he dado a ellos por su porción de mis ofrendas encendidas; es cosa santísima, como el sacrificio por el pecado, y como el sacrificio por la culpa. 18 Todos los varones de los hijos de Aarón comerán de ella. Estatuto perpetuo será para vuestras generaciones tocante a las ofrendas encendidas para Jehová; toda cosa que tocare en ellas será santificada.

19 Habló también Jehová a Moisés, diciendo: 20 Esta es la ofrenda de Aarón y de sus hijos, que ofrecerán a Jehová el día que fueren ungidos: la décima parte de un efa de flor de harina, ofrenda perpetua, la mitad a la mañana y la mitad a la tarde. 21 En sartén se preparará con aceite; frita la traerás, y los pedazos cocidos de la ofrenda ofrecerás en olor grato a Jehová. 22 Y el sacerdote que en lugar de Aarón fuere ungido de entre sus hijos, hará igual ofrenda. Es estatuto perpetuo de Jehová; toda ella será quemada. 23 Toda ofrenda de sacerdote será enteramente quemada; no se comerá.

24 Y habló Jehová a Moisés, diciendo: 25 Habla a Aarón y a sus hijos, y diles: Esta es la ley del sacrificio expiatorio: en el lugar donde se degüella el holocausto, será degollada la ofrenda por el pecado delante de Jehová; es cosa santísima. 26 El sacerdote que la ofreciere por el pecado, la comerá; en lugar santo será comida, en el atrio del tabernáculo de reunión. 27 Todo lo que tocare su carne, será santificado; y si salpicare su sangre sobre el vestido, lavarás aquello sobre lo cual cayere, en lugar santo. 28 Y la vasija de barro en que fuere cocida, será quebrada; y si fuere cocida en vasija de bronce, será fregada y lavada con agua. 29 Todo varón de entre los sacerdotes la comerá; es cosa santísima. 30 Mas no se comerá ninguna ofrenda de cuya sangre se metiere en el tabernáculo de reunión para hacer expiación en el santuario; al fuego será quemada.